Hablar de la temperatura correcta para secar el cabello siempre desatará un debate. Para unos, secar el cabello con aire frío es lo mejor. Para otros, no hay como secarlo con aire caliente, aunque esto pueda desencadenar el cabello dañado. Sin embargo, descubrimos que secar tu cabello con aire frío o caliente, ambos, son necesarios para tu cabello, y aquí te decimos por qué y cuál es mejor para tu cabello.
La temperatura siempre importa
Ya sea que uses la última tecnología para secar tu cabello, como un cepillo secador o una secadora de cabello tradicional, lo cierto es que estas herramientas cuentan con ambas temperaturas: frío y calor y no mentimos cuando decimos que nuestro cabello necesita las dos, sólo que se usan para diferentes cosas. Por ejemplo, el aire caliente se usa para estilizar tu cabello mientras que el aire frío sirve para secar sin romper la fibra capilar del cabello, ya que, cuando está mojado, nuestro cabello tiende a ser más vulnerable al quiebre. Por eso, dentro de una buena rutina de cuidado de cabello, manejar una bonita temperatura entre los 15 y 20 °C con potencia alta será lo mejor para secar tu cabello. Nada que queme, pero tampoco nada que congele.
¿Cuándo necesito secar con aire caliente?
El aire caliente tiene el poder de evaporar más rápido el agua de tu cabello, por eso lo seca más rápido que el aire frío. Sin embargo, el calor excesivo del secador activa las glándulas sebáceas, produciendo ese exceso de sebo en la raíz.
Por lo tanto, no lavar tu pelo con agua caliente y secarlo con aire frío te va a ayudar muchísimo a controlar la oleosidad y esa sensación de pelo apelmazado.
Si te has realizado un tratamiento que requiera de calor para activarse, como es el caso de la keratina, bótox o alisados, necesitarás usar tu secador con el aire caliente o, de lo contrario, perderás rápidamente el efecto de los tratamientos y habrás gastado tiempo y dinero en el salón de belleza.
Secar el cabello con aire frío
Si secas tu pelo con aire frío, tu peinado durará mucho más. El calor es el que da la forma durante el cepillado, el aire frío fija el peinado.
Usa el aire frío al día siguiente del peinado, eso levantará tus raíces y evitará que tu cabello se apelmace. Secar tu pelo con aire frío es una excelente decisión, ya que evitarás dañar tu cabello y, por el contrario, tendrás un cabello sano y brilloso.
El aire frío es una muy buena opción a la hora de secar tu cabello, ya que ganarás elasticidad, brillo y evitarás dañar la fibra capilar con las altas temperaturas. De la misma forma que al lavar el cabello con agua fría sellas la cutícula y evitas su fragilidad y rotura, el aire frío del secador evita que el cabello se dañe. Está comprobado que las cutículas del cabello se abren por exceso de calor.
Si tienes el cabello fino o delgado, seguramente tiene una tendencia a las puntas abiertas y corre mayor riesgo de debilitarse y romperse. Por eso, con más razón deberías secarlo con aire frío.
La mejor forma de secar tu cabello
Antes de empezar a secar el cabello, es necesario quitar bien la humedad con una toalla, sin frotar el cabello para no romperlo. Se puede incluso hacer uso de una toalla turbante -algunas aceleran el proceso de secado- para que sea más fácil envolver el cabello.
Si quieres dar volumen, sécalo con la cabeza hacia abajo. Si prefieres controlar el volumen, hazlo con la cabeza recta, presionando las raíces para reducirlo.
También es importante el orden en el que se dirige el aire del secador. Si tienes flequillo, que sea siempre lo primero que seques para que no tome una mala forma al mover la cabeza. Después es recomendable inclinar la cabeza para secar la nuca y la raíz y con la cabeza recta ir trabajando el resto de los mechones.
Muchos estilistas son partidarios de no usar herramientas durante el secado, tan solo los dedos para dirigir el cabello, abriéndolo con los dedos si se tiene fino. No obstante, para un resultado natural se puede usar un cepillo de pala clásico (también llamado paddle brush) o un cepillo específico para ser usado durante el proceso de secado para ayudar a que el calor penetre de forma correcta y regular y el cabello se seque en menos tiempo.
Así que ya lo sabes. Utiliza el aire caliente de tu cepillo secador o secadora para estilizar tu cabello y el aire frío para secarlo sin maltratarlo.
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