El COVID-19 causó una revolución en nuestras vidas, al punto de que ha pasado el tiempo y seguimos descubriendo todos sus alcances. La pérdida temporal de cabello es uno de los principales síntomas de post Covid y aquí te decimos qué puedes hacer al respecto.
Si te recuperaste de COVID-19 en los últimos meses, es probable que ese aumento de la caída no sea una coincidencia. Algunas investigaciones calculan que el 22 por ciento de las personas que fueron hospitalizadas con COVID-19 presentaron una caída temporal del cabello. Es más difícil evaluar cuán frecuente es esta afección en las personas que padecieron formas más leves de la enfermedad, pero los estudios sugieren que la caída del cabello también se encuentra entre los más de 60 síntomas que suelen relacionarse con COVID persistente, algunos de los cuales son más conocidos, como la pérdida del olfato, el deterioro cognitivo y la disfunción sexual.
Los médicos aseguran que ellos también han notado un aumento de pacientes que buscan ayuda para este fenómeno. Cada vez hay más hombres y mujeres de todos los grupos etarios y de todas las profesiones. Se ha extendido bastante.
La piel cabelluda cambia después de una enfermedad
La caída repentina y temporal del cabello tiene un término médico: efluvio telógeno. Se presenta cuando el estrés o la enfermedad desencadenan una caída mucho mayor que la habitual de 50 a 100 cabellos que una persona pierde al día. Sin embargo, no ocurre sólo con la COVID-19: los expertos saben desde hace siglos que las enfermedades graves, las cirugías, la pérdida de sangre, la hospitalización, el parto y los acontecimientos emocionales extremos, como la muerte de un ser querido, pueden desencadenar el efluvio telógeno, por lo que los investigadores han descubierto que las personas con antecedentes de infección de COVID-19 tienen cuatro veces más probabilidades de desarrollar pérdida de cabello que las que no se contagiaron.
A pesar de todos los estudios que se han llevado a cabo, no está del todo claro cómo estos factores de estrés físico y emocional provocan el efluvio telógeno. Muchos dermatólogos creen que la hormona del estrés, el cortisol, puede tener cierta relación, aunque también podría haber otras sustancias químicas que les indiquen a los folículos pilosos que llegó el momento de desprenderse. La COVID-19 ha sido un golpe doble para muchas personas, ya que el estrés mental de vivir una pandemia acompaña al estrés físico de la propia enfermedad.
En épocas normales, cada uno de los cabellos pasa por tres fases: la fase de crecimiento, llamada fase anágena, la fase de transición, o catágena, y una fase de reposo, también conocida como fase telógena, tras la cual la hebra se cae y el folículo repite todo el proceso. Las hebras pasan por diferentes fases del ciclo en momentos distintos; solo entre el cinco y el 10 por ciento del cabello debería estar en la fase telógena al mismo tiempo. (El vello de otras partes del cuerpo entra en la fase telógena en distintas proporciones).
El efluvio telógeno provoca un corto circuito en el ciclo de muchos cabellos. En consecuencia, al final entre el 30 y el 50 por ciento del cabello de la cabeza está en la fase de muda y es probable que notes que se caen mechones dos o tres meses después de un suceso desagradable.
La pérdida de cabello dura de seis a nueve meses, lo cual puede parecer una eternidad. A continuación, la caída se ralentiza y comienza a crecer pelo nuevo.
¿Puedes hacer algo más que esperar?
Si empiezas a notar una caída repentina del cabello o te preocupa la cantidad de volumen que estás perdiendo, quizá sea buena idea acudir al médico desde el principio. Por lo general, sabrás si estás perdiendo pelo mucho antes de que alguien pueda corroborarlo clínicamente. Si actúas pronto, sobre todo si la caída del cabello está relacionada con una enfermedad subyacente, podrás tratarla con eficacia.
El doctor elaborará tu historial médico, te pedirá algunos análisis de sangre y tal vez te haga una prueba de jalón de pelo, en la que tomará pequeñas secciones de pelo de diferentes partes del cuero cabelludo y jalará con suavidad. Si se caen seis o más hebras sin resistencia, es un indicador positivo de pérdida activa. En algunos casos, el médico también manda a hacer una biopsia para analizar los folículos pilosos.
Si la prueba de jalón del pelo es positiva y la piel cabelluda no muestra signos de enrojecimiento o cicatrización, que son indicadores de otros tipos de pérdida de cabello, lo más probable es que tengas efluvio telógeno. La mayoría de los profesionales de la salud aconsejan esperar a que el pelo vuelva a crecer solo, porque se sabe que este fenómeno es temporal. “Gran parte de lo que hago es aconsejarles a las personas cuando se presenta el problema y animarlas al asegurarles que esto mejorará”, comentó Arash Mostaghimi, director del servicio de dermatología para pacientes del Brigham and Women’s Hospital de Boston.
El simple hecho de controlar el estrés puede ser otra solución para el efluvio telógeno. Los pacientes que tienen pérdida de cabello podría funcionarles ver a un terapeuta, porque sabemos que el estrés ocasiona la caída de cabello y esta a su vez provoca estrés. El cabello es parte muy importante de nuestra identidad.
La mayoría de los dermatólogos coinciden en que recurrir a suplementos y champús para la caída del cabello es un gran apoyo, tanto emocional como físico, ya que shampoos y acondicionadores contienen ingredientes activos que estimulan el crecimiento del cabello, ayudando a acelerar el proceso. Shampoo REVITA de DS Laboratories, diseñado exclusivamente por dermatólogos internacionales, para mantener la vitalidad de la piel cabelluda y actuar contra la disfunción folicular, obteniendo los mejores resultados en poco tiempo. En estudios clínicos, los novedosos ingredientes con acción estimulante de Revita Shampoo están asociados con un crecimiento más rápido y su regeneración tras episodios de pérdida del cabello. Entre los principales figuran los que bloquean la DHT (dihidrotestosterona), cafeína y biotina, los cuales son esenciales para el crecimiento del cabello. Revita Shampoo es adecuado para todo tipo de cabello. Para apoyar la estimulación de crecimiento, Revita Acondicionador tiene como objetivo favorecer la salud de los folículos capilares al incorporar innovadoras células madres vegetales. Los ingredientes de Revita Acondicionador, cada uno evaluado y probado en ensayos clínicos, están diseñados específicamente para la piel cabelluda, proporcionando importantes beneficios contra la disfunción folicular.
A la gente también le gusta sentir que controla mucho más su piel, su cabello y sus uñas a través de las cosas que consume mediante suplementos alimenticios, como REVITA TABLETS e Integra Tabletas. Revita Tablets es un suplemento alimenticio diseñado para detener la caída del cabello, favorece su crecimiento y lo mantiene sano gracias a sus nutrientes y antioxidantes. Basada en las últimas tendencias terapéuticas para el tratamiento de la alopecia, su fórmula actúa en todos los factores relacionados con la alopecia: oxidativo, inflamatorio y hormonal.
Tabletas Integra contiene 5 ingredientes activos, entre los que se encuentran la procianidina B2 y el EUK134, poderosos antioxidantes que contrarrestan el estrés oxidativo, causante de la pérdida del cabello; biotina que convierte los nutrientes en energía y extracto de Canadian willowherb (Epilobium Angustifolium L.) que posee increíbles propiedades antinflamatorias que previenen la caída del cabello. Encuéntralas a buen precio en nuestro sitio web.
La mayoría de las personas verá un breve rebrote incluso antes de que la caída del cabello desaparezca por completo. El tratamiento puede ayudar a que vuelva a crecer el cabello en un plazo de cuatro a seis meses, según Green. Pero si se decide esperar, el cabello volverá a crecer de forma natural. Pueden pasar 12 meses o más, sobre todo si llevas un peinado hasta los hombros o más largo, porque el cabello crece muy lentamente, normalmente menos de 1,2 centímetros al mes.
Algunas personas pueden sentir que su cabello nunca recupera su volumen anterior: los médicos han observado que el efluvio telógeno puede desencadenar ocasionalmente otros tipos de pérdida de cabello más permanente, como la calvicie de patrón femenino o masculino, aunque no saben por qué. En otros casos, el efluvio telógeno puede ser un signo de otro problema de salud como un problema de tiroides o un trastorno autoinmune.
Lo mejor es tratar el cabello con cuidado mientras esperas a que vuelva a crecer. Evita los utensilios de peinado que emplean calor o los peinados que causen mucha tensión, como una cola de caballo apretada que puede debilitar aún más los folículos pilosos. Complementa tu alimentación con nuestros suplementos alimenticios y comprueba por qué Revita Shampoo y Revita Acondicionador son los número uno en el mercado para frenar la caída del cabello y estimular la regeneración capilar.
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